Balleneros en conjunto con el gobierno japonés acusan a Paul Watson (Capitán de Sea Shepherd) de sabotear actividades de la flota que anualmente ensucia la Antártica con sangre de ballenas.Japón, declaro bajo el argumento de “los sabotajes por Paul” que pedirán a la organización policial mundial INTERPOL información y actividades del Canadiense Capitán de Sea Shepherd y añadieron que no lo arrestaran a nivel internacional pero al momento de pisar suelo japonés lo será.
Watson, de 59 años y fundador de Sea Shepherd en 1977, es sospechoso de instar al sabotaje de las actividades de la flota ballenera nipona en el Antártico y de haber ordenado al neozelandés Peter Bethune que arrojara una botella con sustancias químicas a la cubierta de uno de los balleneros.
Bethune, neozelandés, fue detenido ese mes en aguas antárticas tras abordar un buque de la flota japonesa y trasladado en marzo a Tokio, donde está detenido a la espera de juicio.
En respuesta a esta nueva carta del gobierno japonés, Paul declaro:
"Japón está haciendo todo lo que está en su mano para evitar que el próximo año vayamos al Océano Antártico"
Según reconoció el propio Gobierno nipón, las actividades de "obstrucción" del grupo Sea Shepherd impidieron que su flota alcanzara su cuota anual del 2009 (que terminó el pasado 31 de marzo).
La industria ballenera cazó en la temporada de 2009 un total de 507 ballenas en la Antártica, casi la mitad de las que se había propuesto, según datos de la Agencia japonesa de Pesca.
Sabemos que Paul Watson y la tripulación no se rendirán ya que están bajo motivaciones justas.
También exigimos la liberación de Peter Bethune, prisionero por salvar vidas.
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